Asegúrate de utilizar los cajeros identificados con el logo de la Red ATH®, los que siempre te han brindado seguridad en tus transacciones, no pongas en riesgo tu seguridad ni tu dinero.
Evita visitar cajeros a altas horas de la noche, en lugares solitarios o con poca iluminación.
Si utilizas un cajero automático drive-in mantén cerrados los cristales y los seguros de tu auto hasta llegar al cajero. Si hay algún vehículo antes del tuyo, mantén una distancia prudente hasta que el mismo se haya retirado.
Ten a la mano tu tarjeta de débito ATH® y los sobres de depósito o pago preparados, antes de acercarte al cajero automático.
Nunca dejes el recibo en el área del cajero o sus alrededores.
Asegúrate de retirar tu tarjeta y que la pantalla vuelva al inicio cuando termines.
Al marcar tu número secreto evita que otras personas puedan ver tu número, utiliza tu mano para cubrir el teclado.
Mantén tu tarjeta de débito ATH® a la vista y observa cuando el empleado la pasa por el terminal.
Verifica la cantidad antes de ingresar tu PIN y evita que otras personas vean tu número secreto.
Coteja el recibo de compra y verifica que la tarjeta que te devuelven sea la tuya.
Pide ver el terminal donde se procesará la transacción para asegurarte que este no ha sido alterado.
Si tu tarjeta de débito ATH® fue robada o la extraviaste, comunícate con el banco o cooperativa que te emitió la tarjeta. Algunos proveen números de teléfono a los que puedes llamar durante los horarios en que están cerrados al público.
La documentación incluida en el porta-tarjetas
En la página de Internet de tu banco o cooperativa
Coteja el recibo de compra y verifica que la tarjeta que te devuelven sea la tuya.